domingo, 8 de mayo de 2011

Estoy harta


Han vuelto los niños, lo han pasado muy bien y me alegro. Ha llamado mi madre, tiene un admirador y está emocionada del todo. También me alegro. El concierto ha estado bien, un violonchelista bastante bueno, Schumann y la cuarta de Beethoven. Bien.

Santi en su linea, majo y entretenido. El Casco Viejo lleno de turistas, la comida estupenda en el Atlanta, y el viaje de vuelta con una parada estratégica mirando al mar en el alto a la entrada a Laredo.

Todo perfecto y muy bueno y sin embargo yo estoy harta, cansada, vacía, estúpida y rara. Pero sobre todo quiero dejar de ser esta mujer triste y plañidera en la que me he convertido. Están pasando demasiadas cosas por el mundo para perder el tiempo en compadecerse a una misma. La vida no se acaba por que un hombre se vaya, como he podido comprobar, enseguida aparece otro dispuesto a sustituirle. Y ¿Para qué quiero un hombre? ah si ... ya, para éso. Pues bueno, es sencillo cuando se quiere.

Nunca he sido cínica, pero ahora me da todo lo mismo. Estaba leyendo los blogs de mis amigos cuando ha sonado el teléfono. Ya no me asusta y eso si es preocupante. He descolgado a la primera y he preguntado quien era. Como otras veces nadie ha respondido, pero hoy no he colgado, le he dicho al que sea unas cuantas obscenidades, incluso le he hecho proposiciones que desde luego no pensaba atender. Creo que he oido a alguien aguantándose la risa, pero no se si han sido imaginaciones mías. Espero que no sea un espía grabando mis llamadas, porque cuando me oiga se morirá de la risa, de verdad.

Toda mi furia se ha desvanecido cuando he leído a esta mujer las cosas que cuenta y las malas intenciones que tiene. Por mucho que yo me enfade no consigo soltar toda la rabia que llevo dentro que no es poca, ni encuentro alguien en quién descargarla porque pienso que nadie puede remediar lo irremediable. Y desde luego que así es la vida. Algo saldré ganando de todo esto, pero aún no se el qué.

Me voy a la cama. ¿Alguien quiere venir conmigo?

5 comentarios:

  1. Blanca al menos te descargastes con el o la del teléfono, eso ya es un gran paso.
    Que descanses y mañana será otro día.
    Besos.

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  2. Eh, yo no tengo malas intenciones. Lo que pasa es que todo es muy complicado! ¿Qué debo hacer, Blanca, aceptar lo que hay, ser una buena chica, abnegada y responsable, dedicarme a mi hogar y no pensar en ser feliz? Pues no. Sobre todo cuando sé que, si las cosas son como son, es porque hay gente que ha intervenido para conseguirlo.

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  3. Estoy de acuerdo Rebeca, siempre se espera que algunas mujeres seamos buenecitas y nos conformemos con lo que los demás nos "regalan" generosamente y sí, haces bien en luchar por lo que quieres, sobre todo porque tú eres fuerte y decidida y tienes mucha rabia acumulada. Sácala y camina con paso firme.

    Y cuídate.

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  4. Gracias por tus palabras San, si, hoy me he levantado mucho mejor.

    Un beso.

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  5. Que lío esto del teléfono! Debe ser algún baboso que no se atreve a hablarte.
    Saludos. Te sigo.

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